Más vale tarde que nunca… Pero no es suficiente. Por tibio y extemporáneo, el gesto de Ruptura 25 de separarse del gobierno a estas alturas, con un escueto comunicado en rueda de prensa y sin responder preguntas, hoy sirve (y les sirve) de muy poco. Dicen que no pasarán a la oposición. Me provoca risa esa afirmación, ¿pretenden ignorar el hecho de que para este régimen el que no se allana a sus designios es un enemigo al cual eliminar, o al menos, calumniar?
Si al menos hubieran sido un poco más enérgicos… Mas no pueden, tienen el rabo de paja. Después de hacerse de la vista gorda y colaborar con lo que a las claras y desde hace mucho tiempo es un proyecto totalitario y empobrecedor, es muy difícil ahora rasgarse las vestiduras sin ridiculizarse más de lo que ya están.
Les concedo las buenas intenciones iniciales y un alto coeficiente intelectual. Pero su complicidad en la redacción de un 'documento' que de 'Constitución' solo tiene el título, y su colaboración activa en un gobierno sin dios ni ley muestra que tienen una visión política que no le hace justicia a sus privilegiadas preparación, capacidad y oportunidades . Incapaces de anticiparse a las implicaciones de llevar al poder a un individuo con las evidentes taras de que hizo gala Correa durante su campaña, fueron además obsecuentes con los burdos -pero efectivos- ataques de este a la poca institucionalidad que le quedaba al país.
Es cierto que en política hay que ceder para poder avanzar, pero R25 se separa cuando el retroceso es evidente y habiendo entregado casi todo lo que podían ofrecer. Obteniendo muy poco, para el país y para sí mismos. Así como una marca se arruina cuando la gente percibe que el producto no cumple lo que promete, R25 está de momento liquidada. Tendrán que revivirla, reinventarse sus líderes, si es que quieren y pueden. De mi parte les sugiero curarse de ese anacrónico desarrollismo paternalista que es, a fin de cuentas, nada más que una mutación políticamente correcta de la mentalidad feudalista que desde hace tanto tiempo mantiene al Ecuador al margen del desarrollo y la prosperidad.
Creo sin temor a equivocarme que, en el fondo, comparto con quienes hacen R25 el anhelo de mejores días para el Ecuador. ¿Les servirá esto para darse cuenta de que tienen que replantearse todo desde el comienzo? ¿Serán capaces de reconocer, al menos en su fuero interno, de que la 'Constitución' de Montecristi es una afrenta histórica? ¿Estarán dispuestos a reconocer las virtudes y beneficios de un capitalismo sin privilegios como la más efectiva arma para el combate a la pobreza estructural que se vive en el Ecuador? ¿Comprenderán que, en términos políticos y económicos, no tenemos que reinventar la rueda, sino empezar a usarla y difundirla?
Creo también que las personas merecen una segunda oportunidad, más si han mostrado destellos de lucidez. El desafío está claro. Tienen toda una vida para rectificar.