Indignación, vergüenza y nueva traición

Indignación por el ruin abuso de poder de quien detenta la primera autoridad del Estado.  Vergüenza por la celeridad con que un juez temporal dicta sentencia en una demanda por 80 millones de dólares.  La nueva traición viene de parte de la despistada María Paula Romo, quien con su voto en blanco contribuyó a que se cumpla la pretensión del régimen de nombrar a Tania Arias como delegada de la Asamblea a la Comisión Tripartita que reemplazará al Consejo de la Judicatura.

Nada nuevo tengo que decir sobre los acontecimientos de las últimas horas.  La cabeza del Poder Ejecutivo ha abandonado incluso las formas y se muestra ya con total desparpajo, narcotizado de poder, dando rienda suelta a sus más bajas pasiones.  Solo resta seguir atentos y dar muestras concretas de apoyo y solidaridad a Emilio Palacio, diario El Universo y los hermanos Pérez.

En cuanto a María Paula Romo, y por extensión a su incipiente movimiento político Ruptura 25, solo cabe añadir que ha contribuido -por omisión- a sepultar lo poco que quedaba del Poder Judicial en el Ecuador.  La misma persona que en 2005 habló con pasión y raciocinio en contra de la conformación de la "Pichicorte" ahora mira para el otro lado cuando el Ejecutivo se apresta a controlar la función del Estado que aún no tenía bajo su absoluto poder.

Cabe preguntarse, entonces:  ¿Será que el supuesto secuestrado del 30S se está 'curando en salud', no sea que se abra un proceso judicial medianamente independiente en su contra por los trágicos acontecimientos de ese día?

Doctora Romo: la próxima vez quiera saber "quién [más] jodió al país" vaya y mírese al espejo.

Un comentario sobre "Indignación, vergüenza y nueva traición"

  1. “Los pueblos tienen los gobiernos que merecen tener, aunque luego se arrepientan.” Mario Vargas Llosa. Los dictadores tienen miedo, temen hasta de su propia sombra. Protege a su círculo íntimo, la oligarquía de turno. Si dejan el poder temen ser perseguidos sobre todo cuando han venido abusando del poder. Su mejor defensa es el ataque, que asusta a propios y extraños. Pinochet cuando dejó el poder a pesar de curarse en sano quedando como senador vitalicio y gozar de inmunidad diplomática, fue perseguido, retirada su inmunidad, enjuiciado y arrestado. Por otro lado la dictadura castrista prefiere mantenerse en el poder para no arriesgar, controlando todos los poderes del estado, manteniendo los medios de comunicación como propiedad estatal (art. 53 constitución cubana) vigilando y encarcelando a cada persona que exprese libremente su pensamiento acerca del régimen y/o su líder, convirtiendo a una sociedad, un país dominado por el miedo http://youtu.be/dzi08im3uoc

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