El triunfo de la voluntad

En alemán Triumph des Willens, es el título de un documental hecho película estrenado en 1935 que mandó hacer el Führer Adolf Hitler (1889-1945) luego de haber acaparado todo el poder. Los nazis que habían tomado el poder recientemente, luego de un periódo de inestabilidad política (Hitler era el cuarto canciller en menos de cuatro ańos), eran desconocidos por muchos alemanes y el resto del mundo. Para este filme contrata a la célebre actriz y cineasta alemana Leni Riefenstahl (1902-2003), quien dijera que Hitler «quería un filme que movilice, atraiga, impresione a una audiencia que no estaba necesariamente interesada en la política.» Por la época en que Riefenstahl terminara de dirigir su primer film en 1932, escucha por primera vez un discurso de Hitler en un mitin político nazi, admitiendo haber quedado impresionada. El filme ‘El triunfo de la voluntad’ es considerado como una de las películas de propaganda más conocidas en la historia del cine.

En la cinta se busca elever el espíritu y amor por la patria, tierra sagrada. Se puede ver al Führer ir de pueblo en pueblo, muy campechano pero majestuoso a la vez. Popular entre las masas, y más que nada entre la juventud alemana de aquel entonces. Es un acto de fe y confianza al proyecto de cambio. Ańos de humillaciones no regresarán, el gran cambio llega gracias a que el pueblo sabiamente a elegido a un buen líder. Una persona, un líder, una república, un país. El Estado, endiosado en cada discurso, es personificado en el partido y su líder. La revolución Nacional Socialista. El vídeo con audio original en alemán y subtítulos en inglés tiene una duración de 1:44:27

Sieg Heil, Mein Führer

Triumph des Willens High Quality reupload


http://www.youtube.com/watch?v=LPAxaFxjiDk&feature

Cada ministro del Tercer Reich no repara en elogiar al guía y al Nacional Socialismo. A la vez, en la propaganda, se elogia las maravillas del Estado, ya no importa si está en buenas o en malas manos. Friedrich Hegel (1770-1831) llamó al Estado ‘el absoluto’. Ferdinand Lassalle (1825-1864) dijo ‘el Estado es Dios’. El Führer recibe mensajes de Dios dijo el profesor Werner Sombart (1863-1941) en su libro ‘Socialismo Alemán’ (Deutscher Sozialismus, 1934), todo un bestseller en su tiempo, que trata sobre el Tercer Reich, el nacimiento de la nueva República.

NOTA: Una de las populares críticas a los buenos economistas es que solo toman en cuenta el largo plazo. Aunque en realidad lo que se hace es distinguir entre el corto y largo plazo. Asi como ciertos venenos actúan lentamente, el intervencionismo a largo plazo lleva al desastre. Al menos en eso se coincide con John Maynard Keynes (1883-1946) quien dijo : ‘en el largo plazo, todos estamos muertos.’ Los economistas tampoco dicen si el libre mercado es mejor o peor que el proteccionismo, se limita a decir que el proteccionismo e intervencionismo económico no es la vía para mejorar el nivel de vida de la sociedad, peor aun un Estado grande y obeso.

La propaganda que hace latir corazones ardientes haciendolos sentir altivo y soberano, esconde muy bien lo que subrepticiamente el Führer (líder, guía, caudillo) construye, un: ‘Camino de Servidumbre’ (1944), título que uso para su libro quien fuera luego Nobel de Economía en 1974, Friedrich von Hayek (1899-1992), dedicando el texto en mención a los socialistas de todos los partidos. Anteriormente Ludwig von Mises (1881-1973) había escrito su obra: El Socialismo (1922). Para 1940 Mises llegó a escribir en su obra ‘Intervencionismo: un análisis económico’, la gran desilusión (pág. 85):

No se puede negar que la dictadura, el intervencionismo y el socialismo son muy populares hoy en día. No hay argumento lógico que pueda debilitar esta popularidad. Los fanáticos obstinadamente se niegan a escuchar las enseñanzas de la teoría económica. La experiencia no les enseña nada. Ellos se adhieren obstinadamente a sus previos dictámenes.
Para comprender las raíces de esta obstinación, tenemos que tener en cuenta que las personas sufren porque las cosas no siempre suceden como ellos quieren que pasen
.” (Traducción y negrilla son mías.)

En una conferencia hecha en 1951, recogido en el texto ‘El libre mercado y sus enemigos’ (pág. 42), gracias a una Fundación para la libertad (FEE), Mises llegó a decir (traducción y negrillas son mías):

Si la mayoría [agentes del gobierno] esta dominada por malas ideas, nada se puede hacer a excepción de tratar de cambiar las malas ideas. Este asunto le compete a los escritores, autores, economistas , y demás. Desafortunadamente lo que más hay son malos escritores, malos autores, y malos economistas. Aun así, no hay otro camino que tratar de sustituir las buenas ideas por las malas ideas.”